Encontramos que el total desinterés político de controlar sumado al interés de la empresa por no ser controlada, son el principal factor responsable de la acumulación de desperdicios que hemos tenido que sufrir los pasados meses. Por otro lado, desde siempre ha habido una tendencia a realizar grandes campañas de publicidad para promover el municipio como destino turístico. Por lo visto es más sencillo hacer gasto en marketing que en infraestructuras de servicio.